HOMBRE DEJA MOTO EN REPARACIÓN, PERO UNA APP LE DICE LO CONTRARIO.

Esta es la historia de David Redondo un joven salmantino, que un día cualquiera decide llevar su motocicleta de marca BMW a un taller oficial de dicha empresa para que la repararan, pero al día siguiente se da cuenta que su moto había alcanzado una velocidad máxima de 222 km/h cuando esta debía estar en el taller de BMW en revisión.
¿CÓMO SE DIO CUENTA?
Gracias a la tecnología que tiene su motocicleta instalada Redondo se dio cuenta de que esta no estaba en el concesionario de BMW, de Montalvo de Carbajosa de la Sagrada, en Salamanca, lugar en donde había dejado a su ejemplar, para que le verificasen el control de velocidad, sino en una autovía. La moto posee un sistema de telemetría y geolocalización llamado KOMOBI MOTO esta app fue la que le avisó de que ella no se encontraba en el concesionario si no en una autovía recorriendo 222 km/h.
En palabras textuales de Redondo los hechos ocurrieron así; “llevé mi moto al taller oficial de la marca para que me arreglasen una avería. Ya había estado antes en este taller, ya que es el concesionario oficial de la marca, aquí he comprado yo la moto que tengo ahora mismo”, hasta ahí todo marchaba bien, pero al día siguiente recibe varias notificaciones en su celular, de la app de KOMOBI MOTO, sistema que le tiene instalado desde hace varios meses. “Me di cuenta de que estaban utilizando mi moto gracias al localizador GPS de KOMOBI MOTO. Me apareció una notificación de KOMOBI en mi teléfono móvil: ‘Moto arrancada’. Es un aviso que realiza el dispositivo siempre que se pone en marcha. Yo sabía que los del taller tendrían que usar mi moto, y así me lo confirmaron desde el concesionario cuando llamé posteriormente, pero lo que no esperaba es ‘todo lo demás”, dice David.
¿QUÉ ES LO QUE SIGUE?
“Una hora después de que cogieran mi moto en el taller volví a revisar la aplicación de KOMOBI MOTO para poder ver la ruta que habían realizado, y saber así en todo momento qué habían hecho con mi moto. Entonces, al ver al detalle toda la ruta en la aplicación (KOMOBI MOTO muestra toda la información de tus rutas y viajes que hagas con tu moto), pude comprobar que mi moto se había puesto a, 222 km/hora ¡Una auténtica pasada!”, cuenta David Redondo.
El dispositivo de localización arrojó los siguientes detalles, a las 18:15 horas, la motocicleta se colocó en movimiento, Route-950 del registro de terminal, realizó 37,02 kilómetros y regresando al punto de partida al concesionario de BMW, a las 18:42 horas. En la trayectoria de la BMW del salmantino logró una media superior a los 82 km/h con mezcla de recorrido urbano, periurbano e interurbano, de igual forma la app arrojó que la motocicleta alcanzó los 222 km/h cuando circulaba por la autovía A-50, con un ángulo máximo de inclinación de 37,1 º.
EL CONCESIONARIO NO LE DA RESPUESTA ACERCA DE LO OCURRIDO
Viendo todo lo que le había ocurrido a su motocicleta y atendiendo a las alertas emitidas por la app de KOMOBI MOTO, el salmantino hace una llamada telefónica al taller a las 19:00 horas para que le dieran una explicación de porqué habían utilizado la motocicleta y que le dieran la localización de esta. ¿Qué le respondieron? “La respuesta fue que acababa de llegar el mecánico con la moto y que no sabían que había pasado”, pasaban los días y Redondo estaba a la espera de que le confirmaran que había ocurrido con su BMW y que se la devolvieran; David afirma que, “en el taller no tenían ni idea de que tenía instalado mi localizador GPS de KOMOBI MOTO. No sabían que tenía conocimiento en todo momento de lo que estaban haciendo con mi moto. Cuando llamé al taller para ver qué había pasado y qué estaban haciendo con mi moto lo único que me dijeron es que no tenían ni idea de lo que había ocurrido, y que hablarían con el responsable para saber todo, y que me contestarían algo. Solo me dijeron que si llegaba una multa se harían cargo. También me comentaron que se iban a disculpar conmigo”, dice David. Aunque le regresaron su motocicleta, todavía no le dan una explicación sobre lo ocurrido.
¿PODRÍAN IR A PRISIÓN LOS RESPONSABLES?
La respuesta es sí, ya que Redondo denunciará doblemente este acontecimiento. Tanto en la Guardia Civil y a través de la IMU (Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas), asociación de la que hace parte. “Lo primero que sentí fue enfado, y después una sensación de impotencia de decir qué están haciendo con mi moto, ya que yo les llevo mi moto para que la reparen, no para que se pongan a jugar con ella”, afirma.
La circular a 222 km/h es causante de un delito contra la Seguridad Vial (artículos 379.1, 380.1 y 30.2 del Código Penal), en base a las pruebas obtenidas y a las que ha tenido acceso el Departamento de Seguridad Vial de la IMU, y podría acarrear multas de gravedad o incluso prisión. La IMU también advierte de que se ha realizado un uso “no autorizado” de una motocicleta dejada para subsanar una avería en el taller.
Por todo esto, la asociación ha pedido de manera urgente que se investiguen los acontecimientos que colocaron en peligro la seguridad del tráfico y los cuales pueden ser constitutivos de infracción penal. La IMU, dice textualmente, “Con la moto de David se ha cometido un presunto delito, y él es funcionario público. No denunciar los hechos podría traerle graves consecuencias, como perder su trabajo. Afortunadamente al entregar la moto en el taller recibió la orden de reparación, con lo que podrá demostrar que en el momento de los hechos no era él quien conducía la motocicleta”.
KOMOBI MOTO MÁS QUE UN GPS
Gracias al informe entregado por KOMOBI MOTO, David puede presentar esas pruebas a su favor, ya que este tiene todos los detalles de lo ocurrido, lo que hace que este sistema de telemetría y geolocalización de la empresa española, sea uno de los que los motoristas instalen más en sus motocicletas por su grande precisión. Y porque da detalles exactos y reales de que está haciendo su motocicleta; como, por ejemplo: la velocidad, tiempo de trayecto, ángulo de inclinación, mapa de calor, kilómetros realizados y más características. KOMOBI MOTO posee dos planes, PREMIUM y PLUS el de David Redondo. Este último traza un trayecto de seguimiento con una frecuencia de un hercio y su lectura de velocidad obtiene mayor exactitud que la del velocímetro de la moto, al ser una triangulación por satélite muy ligera. Los detalles se envían en tiempo real al celular del dueño de la motocicleta.
Redacción: Anith Judith Suárez Gutiérrez.