LLEGA EL SUPERDEPORTIVO HÍBRIDO ENCHUFABLE DE WOKING, EL NUEVO MCLAREN ARTURA.

La llegada del Artura híbrido supone un hito en la historia de la marca de Woking, un superdeportivo híbrido enchufable de la firma de Woking, presentado en febrero de 2021, entrega una potencia combinada de 680 caballos de potencia que se originan de un motor V6 biturbo de 3.0 litros y 585 caballos y de uno eléctrico de 95 caballos situado en la caja de cambios.
Este superdeportivo también es el primero que se vale de la MCLA o McLaren Carbon Lightweight Architecture, una nueva plataforma de fibra de carbono que el fabricante británico ha diseñado específicamente para coches electrificados. La veremos con mucha frecuencia en los próximos años, porque a partir de ella se desarrollará toda esta nueva familia de superdeportivos híbridos.
En su frontal nos encontramos ante un agachado capó bajo que queda flanqueado por dos grandes hendiduras que, a cada lado, imitan el contorno del logo de Mclaren y alojan tanto los grupos ópticos principales, como las entradas de aire que propician las «air curtain» como la luz diurna de led, que ahora es una simple línea bajo el faro.
Las dimensiones oficiales revelan un supercar de 4,53 metros de largo, 2,08 de ancho y una altura de solo 1,19 metros que, sin embargo, alcanza una distancia entre ejes considerable: de 2,64 metros y se conforma con un maletero de 160 litros. Es, por tanto, un superdeportivo medio, aunque McLaren lo sitúa en una categoría propia debido a su mecánica, la llamada High-Performance Hybrid o HPH, en detrimento de la Sport Series.
La MCLA pesa solamente 82 kilos, compensando así buena parte de los 130 kilos que supone la adopción del nuevo sistema híbrido enchufable. Incluye un compartimento específico para la batería, entre otros elementos.
“Para nosotros, la ligereza y la tecnología híbrida de alto rendimiento van de la mano para lograr un mejor rendimiento y vehículos más eficientes”, explica el comunicado oficial. “Nuestra experiencia en la fabricación de compuestos ligeros y fibra de carbono, combinada con nuestra experiencia en tecnologías de baterías de vanguardia y sistemas de propulsión híbridos de alto rendimiento, nos coloca en una posición ideal para ofrecer niveles sin concesiones de conducción electrificada de alto rendimiento que hasta ahora simplemente eran inalcanzables».
Para el motor se opta por el nuevo motor de gasolina V6 de 3 litros, con doble turbocompresor y un motor eléctrico. En total, obtenemos unos 677 CV y 720 Nm. En el caso del motor eléctrico de 95 CV, se obtiene un toque de 225 Nm y una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,0 segundos, pudiendo alcanzar los 200 km/h en 8,3 segundos. La velocidad máxima del McLaren Artura está limitada electrónicamente a los 330 km/h.
Otra de las labores del motor eléctrico del Artura es que se encarga de la reversa, simplemente gira en sentido contrario, y la transmisión tiene ocho relaciones. Es decir, las mismas que la transmisión de siete velocidades que venían usando los demás McLaren, pues la octava que se agregaba era la reversa que ya no tiene la nueva.
Para recargar el motor eléctrico el McLaren Artura se puede hacer principalmente por medio de una toma externa, es decir que es un híbrido enchufable, y en dos horas y media podría recuperar hasta el 80% de la carga. También se puede hacer por medio de los modos de manejo pero no tiene frenado regenerativo porque McLaren no quería perder la respuesta del pedal. En modo eléctrico, la autonomía es de hasta 32 km.
Incluye una suspensión adaptativa y unas llantas de 19 y 20 pulgadas para el tren delantero y trasero respectivamente. Los frenos de disco alcanzan los 390 milímetros de diámetro delante y los 380 mm detrás, con pinzas de seis y cuatro pistones respectivamente. Pero lo más novedoso de su arsenal técnico es un diferencial electrónico integrado en la transmisión, para optimizar al máximo la motricidad en curva y que encaja perfectamente con una dirección de asistencia hidráulica y no una eléctrica como marcan los cánones en la actualidad.
Cuenta con un sistema conocido como Proactive Damping Control o control proactivo de la amortiguación, que modula la compresión de los amortiguadores hidráulicos en base a la lectura que unos sensores hacen del estado del asfalto que se encuentra delante del vehículo. Los datos se procesan en menos de 0,002 segundos.
En el interior, McLaren ofrece conectividad con Apple CarPlay y Android Auto, a través de dos pantallas. El vehículo incluye la telemetría habitual de la marca, desde navegación hasta velocidad de crucero, pasando por una llave bluetooth que detecta cuando el conductor se acerca y enciende el sistema antes de tiempo.
Este modelo además cumplirá un papel clave a la hora de responder a las exigencias presentes y futuras del gobierno británico a nivel medioambiental, que tiene como objetivo prohibir la venta de nuevos coches de combustión –incluso híbridos– en 2032. Sea como fuere, lo único que está claro es que el McLaren Artura ya es una realidad que estará entre nosotros esta misma primavera y que a partir de entonces, todos sus sucesores compartirán con él una característica: la electrificación.
Redacción: Jineth Alejandra Sanjuán Rincón